Se pone el conejo partido en una fuente con la cebolla y la zanahoria partida en trozos y se le añade el vino, vinagre, laurel, pimienta y tomillo.
Se deja 12 horas en el frigorífico y luego se pone en una fuente de horno con la salsa, se mete a horno a 180º durante 90', cuando se saca se bate la salsa y si queda muy clara se liga con harina.